Perú un país de misterios y leyendas, de esos que retan al tiempo y las creencias. A 35 km de Juli muy cerca del Titicaca, se encuentra uno de los más relevantes lugares turísticos para visitar, una "puerta pétrea" que, en principio no conduce a ningún sitio. Rodeada de verdes llanuras se levanta la considerada maravilla única de la región: La Puerta de Aramu Muru, un pórtico labrado en la roca de siete metros de lado. Se la conoce con el nombre de "La Puerta Mágica de Aramu Muru". Un lugar sagrado para chamánes (yatris) y creyentes de la zona.
Cuenta la leyenda que, hará unos 450 años un sacerdote Inca en huida de los conquistadores españoles, se escondió en estas montañas para guardar el "Disco de Oro". Éste habría sido creado por los dioses, para la sanación de los enfermos y la iniciación de chamánes-sacerdotes. El sacerdote, conocedor del poder de la misteriosa puerta la atravesó portando consigo el disco de oro, y no regresó jamás.
Otra historia más reciente cuenta cómo, en 1974, parte de los integrantes de una banda de música, consiguieron "atravesar" la Puerta y no volviendo a salir. Esto fue divulgado por el resto de la banda, que no atravesó el portal.
Los locales dicen que es la entrada al "Templo de la Iluminación de los Dioses Merú" o "Hayu Marca" y cuentan extrañas historias sobre la "ciudad iluminada" que se vislumbra algunas tardes, en que la puerta se hace translúcida. Se supone que las personas más sensibles al tocar con ambas manos los lados interiores del marco de la puerta de piedra y apoyando la cabeza en una hendidura que hay en esta, pueden percibir extrañas sensaciones, como visión de fuego, melodías musicales e incluso la visión de túneles que atravesarían la montaña. Aunque de los cientos de personas que han intentado percibir estos fenómenos, sólo unas pocas consiguieron notar alguna de las sensaciones anteriormente descritas. Los nativos la consideran una puerta en sí, y el hombre sería la llave, el cual puede atravesarla cuando entra en sintonía con el sol.